LAS CINCO VICTORIAS DE MERKEL
JOSE MARIA DE AREILZA
ABC
Al llegar la pandemia, la canciller renació de sus cenizas, gestionó con una buena combinación de razón y sentimiento esta nueva crisis y encauzó la impresionante respuesta económica y financiera de la UE
Hay que remontarse a los tiempos de Konrad Adenauer para encontrar un fenómeno político comparable al de Angela Merkel en nuestros días. Hace dos años la canciller parecía acabada y exhausta, tras ganar cuatro elecciones. Había demostrado con creces su altura como una dirigente capaz de afrontar la adversidad, en especial en el ámbito europeo, afrontando una sucesión ininterrumpida de crisis (moneda, refugiados, Brexit y otros populismos…). Era reconocida como la líder del mundo libre, por dejación del presidente de Estados Unidos. Tras tejer cuatro gobiernos de coalición y hacer frente a una fragmentación del panorama político alemán, con el crecimiento de partidos extremistas y de los verdes, anunció que no se presentaría a las elecciones de septiembre de 2021.
Aceptó un doctorado honoris causa por la Universidad de Harvard, donde hizo un discurso de despedida particularmente emotivo para una científica cautelosa. Puso a una fiel sucesora al frente de la CDU, pero en un año AKK se desmoronó y tiró la toalla. Muchos decretaron entonces el final de la era Merkel. Se equivocaban: al llegar la pandemia, la canciller renació de sus cenizas, gestionó con una buena combinación de razón y sentimiento esta nueva crisis y encauzó la impresionante respuesta económica y financiera de la UE.
Tuvo aciertos y errores ante las sucesivas olas del virus, como todos los dirigentes europeos. Pero trabajó intensamente en su partido para acertar en el segundo intento de elegir sucesor. Se enfrentó una vez más con su archienemigo, el conservador Friedrich Merz, eterno aspirante a la cancillería y frenó las aspiraciones de un candidato muy popular, el bávaro Markus Söder. No pocos criticaron que la canciller apoyase a Armin Laschet, el gris primer ministro de Renania del Norte-Westfalia. Su sencillez, europeísmo y fiabilidad le asemejan a Helmut Kohl, el gigante de la unificación alemana y mentor de Merkel. Tras la auto-destrucción de Annalena Baerbock, candidata de Los Verdes, envuelta en varios escándalos, hoy las encuestas claramente sonríen a la CDU. Laschet tiene grandes posibilidades de ser el próximo canciller alemán, una confirmación de que Merkel también sabe salir bien del poder.
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